El monasterio de Silos es un ejemplo admirable: la arquitectura, la escultura, la pintura, la música y el canto, se unen para perfeccionar la mente y el corazón, promoviendo los valores culturales, estéticos, religiosos y comunitarios.
El claustro románico de Silos, es y ha sido siempre el centro de la vida de la comunidad monástica. Hacia él convergen y de él parten los otros edificios del monasterio y todas las actividades del monje.
Los monjes, como creadores de cultura y servidores de sus hermanos los hombres, gestionaron en la Edad Media un hospital y una leprosería. De esta forma se familiarizaron con la botánica.
En una sala medieval, se exponen hoy las piezas principales que se salvaron del naufragio de la desamortización (1835-1880). La visita detenida del museo completa la del claustro.
La biblioteca de Silos, con más de mil años de historia, ha sido creada y conservada por los monjes para su propio servicio.Se ha sabido guardar un rico patrimonio bibliográfico que es valioso en varios campos del saber.
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